20 diciembre, 2008

Too much

Diciembre está siendo tan ajetreado que como habéis podido ver, hace mucho que no actualizo. Pereza, desidia, apatía... ni idea. El caso es que entre final de trimestre en el colegio, los paseos buscando regalos y el concurso de traslados, lo de escribir algo coherente quedaba bastante lejos.

Poder volver a disfrutar preparando actividades en el colegio para los niños ha sido reconfortante. No sólo por el hecho de hacerlo, sino por haber estado los dos cursos anteriores en stand-by. No soy un defensor a ultranza de la navidades pero al menos me gusta el ambiente que se crea en el colegio en estos días. Cansan la preparación, los ensayos y los corre aquí y allí que generan los niños. Pero bendito cansancio. Me gusta pensar que lo que se prepara con ilusión, se multiplica por veintidós ilusiones, veintidós sonrisas y una parte de lo que hacemos se va a quedar para siempre con ellos, que lo recordarán algún día y que les puede aportar mucho o poco, pero algo al menos.

Los regalos también se parecen en algo a lo anterior. Te vuelves loco buscando y comparando pero, al menos a mí, me gusta regalar y ver la cara de la persona al desenvolver. Creo que todos nos retrotraemos justamente a esa época de colegio en la que un regalo era un viaje a lo desconocido, cuando el estómago se te encogía al recibirlo. Cuando lo único que te separaba de un sueño era el papel y sabías que en unos segundos lo ibas a poder tocar. Me quedo con ese momento, con esos segundos en los que sabes lo que puede estar sintiendo la otra persona.

Y luego he tenido la losa del concurso de traslados. Cada colegio, ciudad, pueblo o zona educativa tiene asociado un código de, al menos, once números. En la instancia de solicitud puedes rellenar hasta trescientas opciones diferentes. De locos. Y no te salgas de la casilla, ni enmiendes mínimamente un número porque se invalida la hoja entera. Divertidísimo vamos. Los que crearon este sistema de elección dijeron oye, ¿se lo ponemos fácil o difícil? Pues fácil sería mejor, dijo uno. Claro, lógico. Pero dijo otro, no, vamos a pensar en ellos y como no tienen más que hacer en su vida, les haremos romperse la cabeza un poco. Yo la tabla del 300 no me la aprendí nunca, así que he cogido la calculadora y 300X11 son 3300, que son las casillas tamaño uña del dedo meñique donde colocar cuidadosamente los numeritos. No se me ocurren nada más aburrido y estúpido que hacer en las tardes de diciembre. Pero ha tocado hacerlo.

Sin embargo, la bandeja de lo positivo pesa mucho más en la balanza del mes. Y ahí podría incluir el cumpleaños claro. 33. Debe ser el mes del tres. Mira que si los niños de San Ildefonso cantan el 33.333...

26 noviembre, 2008

Fútbol rosa

La leche. Zapatillas de fútbol rosa. Sabíamos que algo le faltaba el fútbol, y era esto. Estéticamente me parecen perfectas. Le da ese punto de glamour que le faltaba a los terrenos de juego. Mucho trajecito bueno, mucho diseño en los peinados, mucho tatuaje, mucho coche de lujo...pero les faltaba el toque fashion al recibir un balón. Bueno, pues ya lo tenemos.

A disfrutar reinonas, ya podéis salir del armario o, al menos, abrir un poco la puerta.

19 noviembre, 2008

A las cuatro

Cuando salgamos a las cuatro, te voy a crujir las orejas (Bud Spencer dixit). Si estás en tercero y viene uno de sexto a decirte eso, tu mundo cambia al instante. Subes las escaleras hacia la clase pensando en esa hora; te sientas y no haces más que pensar en el momento en el que la mano del otro impacta contra tu oreja. No oyes al maestro, oyes el sonido de la hostia que te han prometido. Miras la pizarra y visualizas tus orejas de un color rojo dolor.

Y por mucho que intentes hablar con el amenazado para tranquilizarle, o con el amable alumno de sexto que ofrece hostias como panes, sabes que sólo vas a alargar la agonía. Más pronto que tarde, llegará el momento. Quizá, con mucha suerte, el repartidor entrará en razón y verá que no le compensa dar una hostia y quedarse sin patio una semana. Lo triste es que en estos casos la razón no sirve. Lo único que funciona es contrarrestar con otra amenaza. No, no es muy educativo pero aún no se ha inventado nada más efectivo.

Es así, no se puede utilizar la lógica en un colegio. Verbigracia.

- ¡¡¡ Profe, profe !!! Jose me ha dicho que soy tonto.
- Pero, ¿a que tú no eres tonto?
- No.
- Pues entonces no te preocupes y luego hablo yo con él para que no te lo diga más, ¿vale?
- Vale.

Problema solucionado. Es el día a día de un colegio, lógicas extrañas pero aplastantes.

08 noviembre, 2008

Para mear y no echar gota


Esta semana han condenado a un bombero por apagar un incendio en su tiempo libre. ¿¡¡¡Mande!!!?

Pues sí, saca a una mujer y a un anciano, en silla de ruedas, de la casa. Después con una manguera de regar trata de apagar el incendio, momento en el que un guardia civil le tira de la manguera y le dice que salga de allí. Se niega. Al terminar de apagar el incendio, sale de la casa, se identifica ante el agente y le pide disculpas por si le había levantado la voz.

Ni corto ni perezoso, el picoleto le denuncia por desacato. Hasta aquí dices, vale, le ha dado un calentón y denuncia que te crió. Pero es que en el juicio le condenan a pagar 180 euros y 500 euros más para pagar las costas del juicio.

Salva dos vidas, consigue que la casa no se queme y como premio, le denuncian, 680 euros y la cara de tonto que se le debe haber quedado.

Me alegro de que el guardia civil pueda dormir ya tranquilo y de que el juez en cuestión pueda contarles algún día a sus hijos y a sus nietos su salomónica decisión.

28 octubre, 2008

Sencillo

Saliendo del portal, a mano derecha, hay un pequeño parque. Si es temprano aún se pueden ver algunos niños corriendo, desquiciando un poco a sus padres y, en algunos casos, haciéndoles sonreir. Cuando pasan las ocho en el reloj se reúnen grupos de chavales de unos dieciocho años con sus voces, sus cigarros mal fumados y su ropa interior exterior.

Pero lo mejor es pasar sobre las tres de la tarde. En un mismo día puedes ver a varios trabajadores durmiendo la siesta sobre sacos, alguien dando de comer pan a las palomas, un trajeado con un portátil y una pareja mirándose de tal modo que no hace falta que digan nada porque sus miradas las puede escuchar cualquiera que pase a su lado.

Como digo, el parque es pequeño, pero tiene vida. Parece ser que a la gente le gusta, le atrae. Me gusta pensar que a sólo unos pasos hay un sitio en el que la gente se siente bien, sin más, sólo por estar allí, aquí. En ocasiones los sitios más sencillos son los más apreciados. Unos cuantos árboles, algo de recogimiento, poco más.

23 octubre, 2008

Lluvia colateral (katiuska que te crió)

Llueve - algún gilipollas pisa un charco y te salpica (cabrón).

Llueve - los niños se desquician porque no salen al patio (30 metros cuadrados para 22 personas son pocos).

Llueve - se inundan la cocina, el comedor, parte de los patios y la entrada del colegio (pero no pasa nada porque dice Espe que la educación madrileña va bien así que debo ser yo que veo problemas en todos lados).

Llueve - saltan los plomos del colegio y estamos media hora sin dar clase porque no hay luz y no se ve un carajo (tranquila Espe, compraremos velas).

Llueve - se inunda Coslada (one more time).

Llueve - sale el típico tonto de turno recordando lo sana que es la lluvia y lo buena que es para el pelo (¿?).

Llueve - la gente se replantea lo planes de toda una tarde ("es que llueve" dicen).

Llueve - ya hay con qué abrir los telediarios (nos gusta ver al reportero de turno mojándose).

Llueve - llama tu madre para preguntar cuánto ha llovido (ya se sabe que las madres, son madres).

En definitiva, que cuando llueve, todos sabemos lo que va a pasar. Si te pilla de buen humor, lo dejas estar. Pero si te levantas de mala hostia...

16 octubre, 2008

Canciones para tus fines de semana




¿Para qué cojones preocuparse por la voz cuando tienes un bajo y una guitarra que suenan como los ángeles?

Voy a hablar con la directora de mi colegio para ver si las puede traer y se tocan unos temas en la fiesta de navidad.

De que los niños se aprendan las letras ya me encargo yo.

05 octubre, 2008

Más uno, seis

Hace unos seis años estaba en Madrid sin trabajo, sin piso y con trescientos euros. Dormía en un colchón en el suelo del cuarto de la plancha Lo primero que hacía por las mañanas era esperar a que abriesen el kiosko a las siete de la mañana, comprar el Segundamano y empezar a llamar a gente que alquilaba pisos. El resto del día consistía en visitar una media nueve pisos y buscar algo de lo que trabajar.

Y no estoy quejándome, no veo todo aquello como algo especialmente duro. Sabía lo que me encontraría al llegar aquí. Mi futuro a corto plazo era ser teleoperador o algo similar y cobrar setecientos euros pagando trescientos de alquiler. Claro que estoy mejor ahora pero en seis años muy mal me tendría que haber ido como para no avanzar un poco.

¿Vueltas? Pues he dado muchas desde 2002. ¿Gente? De la mayoría guardo buen recuerdo aunque alguna decepción ha habido. ¿Trabajo? He conseguido hacer lo que me gusta. ¿La ciudad? Me gusta, no dejas de descubrir y vivir cosas nuevas de vez en cuando. ¿Lo mejor? Los amigos; los de siempre y los nuevos. ¿Lo peor? Las dos o tres horas que tardo en llegar al Valle del Jerte.

Y con este blog creo que se puede ver parte de todo ese cúmulo de experiencias vividas. Quizá en un futuro valga para algo haber escrito tantas locuras.

02 octubre, 2008

Sile, sile, sile.....nole

Me gusta más el ron que el whisky.
Más la clara con limón que la caña.
Me gusta fumar lucky.
Me gusta más el metro que el autobús.
Prefiero conducir a mirar.
Dormir lo necesario.
Cerrar bares.
Prefiero la barra, mesas mejor no.
Mejor la improvisación que lo previsto.
Me gusta más mi desorden que las estanterías ordenadas.
Recreos sí, exámenes no.
Odio firmar.
Me gustan la niebla, la lluvia y la nieve; por ese orden.
Me gusta el agua fría, en la ducha y en el vaso.
Pan y yema de huevo.
Cerezas cada año, por favor.
Un llamada de teléfono.
Necesito Nirvana o Extremoduro cada poco.
Besar y abrazar, y viceversa.
Odio las camisas y los zapatos.
Me peino como un crio.
Aún desayuno cola-cao.
Plancho y no me disgusta.
Me gusta despertarme de madrugada.
No me disgusta madrugar.
Domingo por la tarde sigue siendo fin de semana.
31 de agosto sigue siendo día libre.
Me gusta escribir, me gusta leer.
Me gusta ser maestro y enseñar a escribir y leer.
Y sí, me gusta ZP.

P.D: Título del post basado en el clásico SILE (si le tengo), NOLE (no le tengo), que siguen repitiendo los niños cuando están viendo los cromos de su amigo y deciden cambiarse los que tienen REPES.

23 septiembre, 2008

Vuelo 101 ( o cómo navegar y volar en un burro )

Si mi teclado fuese un avión y mis dedos el piloto, habría despegado cien veces y una más. Dos años volando. Planeando en ocasiones, volando sin más otras, bombardeando sin piedad alguna de ellas, pero siempre buscando una pista de aterrizaje.

En ocasiones el motor del avión me pide a voces que lo arranque, quiere despegar y quemar queroseno durante horas; otras soy yo el que lo arranco aunque en el vuelo sea él quien me lleve a su antojo. Y durante esos vuelos he encontrado otros pilotos como El marido de Alabama o El cuervo viejo, que son tan kamikazes como yo y saberlos ahí me ayuda a pensar que no estoy como una puta cabra. También hay espectadores que me ven volar y al aterrizar me dicen: "ey, vi como volabas". Y se agradece. A todos pero a Lumatt más que a nadie.

Desconozco el rumbo cuando despego, sólo me importa volar. No sé cuándo, ni porqué volveré a hacerlo pero aún no he tenido la sensación de saberme pilotando el último vuelo. Quizá escribir sea lo menos parecido a volar pero me gusta pensar que cuando cierro un post he estado un rato dando vueltas por el aire. En fin, cada uno tiene sus locuras personales. Y que duren.

Hace bastante tiempo El cuervo viejo decía en su blog que se sentía marinero al hablar de su vida, y me identificaba con esa sensación. Yo me siento piloto al escribir. Poder navegar y volar sin tener velero ni avión está más que bien, pero el día que descubra como me puedo sentir montado en un burro sin estar sobre él, va a ser la leche, me voy a estar riendo yo solo durante horas.

20 septiembre, 2008

Cucurrucucú

Me gusta escuchar la radio. Me gusta mirar la televisión. ¿Eso me convierte en básico? Vale. Y si me gustan es porque escucho y miro. Ni la oigo ni la veo. Sutil y evidente diferencia.

Pero últimamente paso a la fase de oir y ver con demasiada facilidad. Quizá sea culpa mía pero es que en cuanto empiezan a meter paja y a hablar con frases hechas sin decir realmente nada, desconecto. Muchas veces salvo la situación moviendo el dial o dándole al mando. El límite está en tres cambios. Si al tercer cambio sigue la paja, lo mando todo a la mierda.

No sé si habrá bajado la capacidad de expresión en ambos medios o he sido yo el que se ha vuelto estúpidamente exquisito. Sólo unos pocos programas consiguen que los escuche y que los mire. Pocos y cada vez menos.

El otro día me vino a la cabeza la canción de Caetano Veloso. Ahora cada vez que alguien en radio o televisión consigue que deje de escucharle, es como si me estuviese diciendo "cucurrucucú...cucurrucucú...". Y cuando termina de hablar no puedo evitar decir en alto: ¡¡ PALOMA !!

09 septiembre, 2008

Tramposos

Estos se pasaron tres pueblos cuando dijeron "oye, ¿por qué no nos juntamos y nos damos el gustazo? Y claro, así pasa lo que pasa. Que se juntan George Harrison, Roy Orbison, Bob Dylan, Tom Petty y Jeff Lynne (con Jim Keltner en la batería) y oye, que salen canciones, buenas canciones. Pero eso es abusar. Ya sabemos que sois genios, no os paséis Y los tios se graban un disco en diez días, en fin.
Lo mejor de todo esto es quién me descubrió este grupo hace ya unos catorce años. Desde Londres llegó al Jim Jes un sobre acolchado que contenía una cinta (ni CD, ni vinilo; cassette) con un disco de The Traveling Wilburys. Lo remitía Lito. Sí, Lito Zacarías, todo un personaje en las calles y bares torniegos. Sonaba bien, sonaba diferente, sonaba especial. Y parte de lo que escuché fue esto.







Gracias Lito.

04 septiembre, 2008

Pocas ganas

De trabajar, de escuchar, de colaborar, de cumplir normas, de ayudar, de preguntar, de responder, de decir sí, de decir no, de ir, de venir, de regalar un gesto amable, de sentirse parte de algo, de mirar, de limpiar, de renovar, de plantear, de mover el culo y hasta de respirar.

De todo esto es de lo que no tienen ganas algunos y algunas de los que trabajan en educación. Es una pena. Gente que dedica parte de su vida a trabajar con niños, gente que es un referente para ellos.

Si no estás conforme con lo que haces, si no te gusta, vete, dedícate a otra cosa, le harás un favor a mucha gente. Primero a los niños, luego al colegio, después a tus compañeros y, por último, a tí mismo.

Me jode ver gente así trabajando a mi lado. No se ganan el derecho a que les llamen maestro o maestra. No ganan su sueldo. No se puede estar cansado o resoplando cuando llevas cuatro días trabajando. En julio resopla si quieres, pero no ahora.

Quizá esta noche se produzca una alineación de planetas y mañana se levanten con ganas de hacer algo, quizá Neptuno remueva algo en ellos y su horchata se convierta en sangre. Ojalá.

01 septiembre, 2008

Ubicarse

Sólo llamaba para ver qué tal la vuelta al cole. Hombre, pues teniendo en cuenta que he tenido dos meses de vacaciones, que me gusta mi trabajo y que algunos malos espíritus se fueron del colegio... pues voy a decir que bastante bien. Ya, pero bueno, después de tanto tiempo debe costar más. Si hubiese tenido sólo quince días y al volver tuviese que subir a un andamio pues podría quejarme.

Seamos sinceros. Si eres maestro y te gusta lo que haces, ni puedes, ni debes quejarte. Sesenta y dos días para hacer lo que te de la gana y cuando vuelves tienes aún unos días de adaptación antes de que se incorporen los niños. Se agradecen las llamadas para preguntar pero si dijese que mal se reirían de mi y me llamarían cabrón con todo motivo.

Así que ahora vuelta al cole, vuelta de carrusel deportivo, vuelta al metro, vuelta a respirar CO2 a todas horas y oye, también vuelta ciclista a España (perdón por el chiste fácil). Ánimo y feliz regreso a todos.

16 julio, 2008

Casi reformado

La habitación no era demasiado grande pero nadie que entrara en ella podía decir que era pequeña. Se sentía cómodo porque tenía espacio suficiente para la cama y una mesa amplia en la que le gustaba sentarse a escribir cuando sus migrañas se lo permitían.

Desde que llegó a la ciudad había estado buscando un piso como aquel. El resto del piso no tenía nada que ver con la habitación. El salón había sido reformado meses atrás y tenía un mobiliario que podría considerarse actual. La cocina también tenía electrodomésticos nuevos y el baño y el recibidor se reformaron al mismo tiempo que el salón.

El caso es que la habitación era lo único que seguía teniendo un aire de los ochenta que no le disgustaba en absoluto. Le recomendaron cambiarlo para que estuviese en consonancia con todo lo demás pero se negó. Estaba seguro de que necesitaba aquel ambiente que transmitía la luz que entraba por las cortinas amarillentas, el suelo algo envejecido e incluso las marcas que habían dejado los anteriores inquilinos en las paredes.

Le gustaba la sensación de pasar del pasillo a la habitación. Y al contrario. Era como entrar en otro lugar. Nada le reconfortaba más que sentarse frente a la ventana, colocar su portátil sobre la mesa y escribir. Si alguna idea se le atascaba en la cabeza no tenía más que pasear un poco por la habitación y enseguida se le organizaban las frases sin ni siquiera pensar en ello. Escribir le servía para después crear.

Cuando los periodistas le preguntaron por su fuente de inspiración y le instaron a explicar cómo conseguía realizar aquellas esculturas jamás vistas antes, aquel estilo innovador que marcaría una época, un estilo y que le valieron ser la portada de la principales publicaciones de arte y de nuevas tendencias, él simplemente respondió: " Una habitación vieja y unas cortinas amarillas".

26 junio, 2008

Arrieritos y cerdos

Los últimos días de curso en un colegio son extraños. Lo evidente es que durante una semana no hay críos y eso a estas alturas, y más en este centro, es de agradecer. No es que nos toquemos las narices precisamente. Hacer informes de todos los alumnos, recoger la clase (en mi caso son dos; la mía y la de inglés), reuniones, claustros, papelito arriba, papelito abajo... Ya sé que muchos se están descojonando al leer esto, pero bueno, están en su derecho.

Supongo que en este trabajo, como en cualquier otro, te puedes tomar las cosas de dos modos. Una es hacer lo que tienes que hacer, y alguna más que no te corresponde. La otra es pasar tres pueblos de todo, de lo tuyo y de ayudar a los demás.

Pero este año es todo más extraño aún. Al capullo de director este que tenemos hemos conseguido largarle del colegio y se respira un clima de tensa espera. Una mezcla de alegría, de venganza y de sonrisa complice con la gente.

Jamás nadie provocó en mí esta unión de odio y asco que se ha ido acumulando en estos dos años. Así que ahora que el jodido es él, me alegro. Hay gente que dice que para lo que le queda y ya que se va, que da igual todo. No lo creo. Una persona que hace daño intencionadamente, que humilla, que insulta y que desprecia a sus propios compañeros, se merece todo lo peor que le pueda pasar.

Y si alguno no está de acuerdo, que piense en los cuatro años de educación hipotecada que han sufrido los alumnos del colegio. Si no gestionas bien un centro, si no reclamas profesionales en audición y lenguaje o profesores de apoyo cuando tienes la posibilidad de hacerlo, lo que consigues es lo que hay ahora. Y lo que hay en este colegio son alumnos con problemas que no reciben la atención que merecen, hay falta de recursos para trabajar, hay instalaciones deterioradas, hay desmotivación...

Sabio el refranero español. "Arrieros somos y...", y "a cada cerdo...". Que se joda, que le vaya mal, que le puteen tanto como él nos ha puteado al resto, que sufra. Básicamente, que le den por el culo.

16 junio, 2008

Un año más

Ayer estaba complicado, pero siendo la Real Sociedad, me quedaba la esperanza de que a las ocho estuviese dando saltos yo sólo en el salón. Al final sucedió lo más lógico: me quedé sentado en el sofá como un imbécil y bastante mosqueado por los dos últimos partidos.

Luego, viendo cómo remontaron los turcos un 0 - 2 a quince minutos del final del partido, me reconcilié con el fútbol. Pero por momentos me entraba la mala hostia viendo a Nihat metiendo goles. ¡¡ Qué tiempos aquellos en los que Nihat y Karpin montaban la contra y Kovasevic fundía porterías !! Sigue mi mosqueo de forofo realista e intento ocultarlo pensando en los cuatro días que me quedan de clase y pensando que el día treinta acaba el curso.

Así que si a Villa le da por meter cuatro goles más y acabamos campeones de Europa, pues bien. Y si no, pues también.

11 junio, 2008

Tu cara en un sobre

Ayer repartí seis cartas. Iban dirigidas a los padres de los alumnos que considero que deben repetir. Les indicaba que es recomendable que pasen un año más en 4º porque no alcanzan los niveles mínimos. De hecho, algunos alcanzan a duras penas un nivel de 3º. Seis son muchos, es cierto, pero visto el nivel del grupo a principios de curso, es casi sorprendente que no sean más.

Ahí no sólo decido yo, ya que, desgraciadamente, por mi clase pasan hasta seis profesores, algo más propio de secundaria que de primaria. Pero una vez consultados algunos de ellos, han coincidido en que deben "no promocionar" (como se dice ahora) o "repetir" (como se decía antes).

Podría haber cogido el teléfono e informado a los padres en cuestión pero dado que la mayoría de las veces ni siquiera contestan al teléfono, opté por la vía postal. El caso es que ya contaba con que alguna de las cartas se abriese antes de llegar a sus destinatarios. Y se abrieron.

Al entrar hoy en clase corrían los rumores sobre las cartas, sospechas, confirmaciones, y sobre todo, caras. La cara que se te queda cuando lo sabes. Me jode ver esas caras pero estoy convencido de que más de mi parte no puedo poner para que eso no suceda. Si los padres no se preocupan, si la administración no pone más medios cuando se necesitan, ¿qué más se puede hacer?

En fin, cosas de la educación. Y las que quedan.

28 mayo, 2008

Cuando tragar saliva no es suficiente

El miedo, la timidez o las ganas de llorar puedo llegar a paliarlas si me paro un poco, trago saliva, respiro hondo y suelto fuerte el aire . Muchos de mis miedos infantiles los vencí así. Precedido de una mínima reflexión para intentar dar lógica a lo ilógico, tragando, respirando, soltando y volviendo a reflexionar. Ya sé que suena estúpido pero funcionaba.

Más tarde empleé el método con mi más que enfermiza timidez. Funcionó. Al decir esto supongo muchos se extrañarán porque me consta que creen que el que suscribe es un descarado, un caradura cínico y que de lo último que podría llegar a pecar es de timidez. Pero os aseguro que me costó bastantes horas de reflexión vencer el monstruo que retrae la personalidad.

Algo más difícil es parar, cuando se dan, las lágrimas. Cuesta pararlo, pero si no procede o no es el momento adecuado, consigo detenerlas. Ya sé que hay que desahogarse, soltar todo lo que hay dentro...todo ese rollo, lo hago.

Sin embargo, es imposible contener la emoción cuando ves llorando y bien jodida a parte de la gente que más quieres. Debe ser muy duro perder un hermano y debe ser un infierno perder a un hijo, algo que les ha pasado a mi madre y a mis abuelos este fin de semana. Claro que era tío mío pero creo que hay diferencia. Pensé que por mis santos cojones iba estar entero: y lo hice. Pero hubo ciertos momentos en que las lágrimas dijeron, mira chaval, sólo vamos a ser dos o tres así que vamos a salir.

No existe el método perfecto, y es de agradecer que así sea.

20 mayo, 2008

Pajas mentales de mayo

Hallábame yo metido en las habituales idas y venidas por la red y encontreme con un video de un juglar moderno. A raíz de tal hallazgo visioné varios de sus cantares. Hasta toparme con uno de ellos que semejaba sus compases a los de otros juglares más conocidos por el que suscribe.

Macarras ambas eso sí, el caso es que gusté de oir ambas. La conocida, por eso mismo; la descubierta por parecerme atrevida y descarada. Gusto de compartir descubrimientos con los lectores de este pergamino digital de modo que muestro los acordes descubiertos. La primera es la "versión", la segunda, la original.




12 mayo, 2008

3, 2, 1... que ya lo sé !!!

No me gusta la cuenta atrás pre-nada. Odio que la gente diga que faltan ocho días para un puente, pero claro, sólo seis de trabajo y si quitamos no se qué día de no se qué... ¿No van sabiendo ya que cuanto más llevas la cuenta de lo que falta más largo se hace? Coño, cuando queden dos días pues vale, me lo comentas, pero mientras tanto déjame.

Supongo que interiormente todos llevamos la cuenta y lo pensamos en algún momento pero no es necesario hablar de ello a diario. Y dentro de lo malo, ahora se habla de vacaciones y cosas así pero ¿y cuando estabas estudiando y había algún agonía que llevaba la cuenta de días, horas y minutos que faltaban para el examen? ¿Te puedes ir, por favor, un poco a la mierda y dejarme en paz?

Debe ser una de esas conversaciones recurrentes, de las de ascensor. Puestos a elegir prefiero hablar de borrascas y anticiclones. Llegará el día en que en una sola persona se aunen el espíritu cuenta atrás con el espíritu ascensor y nazca gente que de mayor se dedique a decir todo el rato "ya vamos por el segundo, faltan sólo cinco plantas para el séptimo, el tercero, vaya, ya sólo son cuatro las que nos faltan..." Y así hasta morir por no poder soportar tal derroche de creatividad.

En definitiva, faltan algunos días para el día quince (fiesta en Madrid), varios para el fin de semana, bastantes para llegar a junio y sólo tener clase por la mañana. Pero sobre todo, falta una eternidad para las vacaciones. Repito, una eternidad. Y punto.

10 mayo, 2008

Un día de borrasca

El café en el bar le había sentado bien, lo necesitaba después de la mañana que llevaba.

Había pasado una hora más de lo habitual en el atasco. La mañana de lluvia le había hecho llegar tarde y al revisar los papeles en el ascensor se dio cuenta: había olvidado la presentación en casa. Al despedirse de los clientes su jefe entró en la oficina, no habría nuevas oportunidades.

La llamada de las doce no fue mucho mejor. Tenía que recoger a Nico en el colegio. Su mujer se desplazaba en transporte público de modo que no le quedaba más remedio que volver a la carretera y atravesar media ciudad. Lo llevó a casa, y esperó hasta que Ana llegó.

Cuando se dio cuenta había pedido el café pero no había comido. El contacto con la espuma y el aroma del café le hicieron estremecerse. Y poder tomárselo con tranquilidad mientras fumaba acabó de ayudarle a reconciliarse con la vida. Nico sólo tenía una indigestión y Ana le había tranquilizado como sólo ella sabía.

Respiró aliviado, pagó el cortado, y tras ponerse el abrigo echó a correr, llovía bastante. El coche que le arrolló y le desplazó varios metros no pudo frenar a tiempo. Su última sensación fue el contacto con el bordillo, el que le partió la cabeza.

Nico se encontraba mejor pero se asustó cuando su madre dejó caer el teléfono y se puso de rodillas en el suelo. Llovía en la calle.

23 abril, 2008

Let´s dance (algunos no renuevan jejeje)

Ante la inesperada noticia recibida esta misma tarde, no he podido evitar poner la música a toda hostia y bailar como un gilipollas. Sí, ya sé que bien no bailo, pero después de un havana y el subidón que tenía encima, me ha dado por ahí. Y he aquí una muestra de algunos de los hits (variedad en su mayor acepción) que han sonado y que, como mínimo, hay que compartir con los lectores del blog que, en su gran mayoría, se solidarizan con la causa del Chile. Salud y buenos alimentos.









01 abril, 2008

Nunca antes de que sea tarde

Hace tiempo que me dí por vencido. Hace años que lo comprendí. Caí en la cuenta de que los planes, lo previsible y la disciplina personal, no están hechos para mí. Soy desordenado (en todas sus acepciones) desde siempre, cosa que no considero defecto, y menos virtud en aquellos que no lo son. Es simplemente algo que...es.

Los planes me ponen nervioso: ahora esto y luego lo otro. Que va, que va (que va...yo leo a Kierkegaard, que dirían algunos). Lo establecido me da escalofríos. Saber o conocer parte de lo que se va a hacer está bien pero gracias a dios (o Dios) existe la improvisación. Supongo que también hay que saber improvisar, y hacerlo bien, en ciertos momentos.

Algunos dirán que si no planeas ciertas cosas, tus actos o un encuentro, puedes cagarla. Claro, pero haciéndolo también. Y está comprobado. Con planes, la cagas. Improvisando, la cagas. Y viceversa. Conclusión, prefiero improvisar. Me va mejor.

Esto lo hago extensible al momento de acostarme. Hoy de verdad que me acuesto, como muy tarde, a las 11:30. Fácil, ¿verdad?. Mis cojones treinta y tres. Cuando digo eso, acabo en la cama entre doce y doce y media. No puedo evitarlo. Que si House, que si el portátil, que si un cigarro, que si una coca-cola, que si Buenafuente. De momento van a ser las doce y aquí sigo.

Por cierto, mañana cuando llegue me echo la siesta. Bueno, tal vez no.

27 marzo, 2008

Hijos de puta al volante

En el diario gratuito "20 minutos" del este miércoles J.París escribe la siguiente carta al periódico. El título es "un cobarde en la carretera".

Te creías el rey de la carretera hasta que llegamos al control de la Guardia Civil de la A-2 la madrugada del pasado sábado. Fue entonces cuando esperaste nervioso, junto a Guadalajara, a ser observado por los agentes.

Tú y tus amigos mirabais a todas partes desde las ventanas, desencajados. Fue entonces cuando decididiste bajar de tu flamante Seat León rojo entre el atasco previo a pasar el control.

Te acercaste a tu matrícula, FET, y tembloroso, la cambiaste por la original FFT, enseñando tu truco para no ser pillado por el radar, un imán que hacía que tu F fuera una E.

Esta vez te salió bien. Ahí lo llevas, para contárselo a tus nietos. O a tus padres. O a los padres de tus amigos. O al juez, cuando asesines a alguien en la carretera. Que cuando eras joven, además de imprudente, eras un cobarde.

Creo que la carta lo dice todo pero no debe haber muchos Seat León rojos con esa matrícula. Y si se fijó en la matrícula seguro que quien escribe esta carta se fijó también en los números.

13 marzo, 2008

Ampliación de El Prado

La campana de Huesca

Lo primero es lo primero. Y aquí lo primero es dar las gracias al gran Kike. Así da gusto ver un museo; con alguien que trabaja en el propio museo de El Prado, con alguien al que le gusta la pintura, al que le gusta la historia, y que disfruta explicándote todo. Por explicar, nos explicó hasta el suelo.

Además una visita rápida y bien comentada, cunde mucho más. Lo ves más o menos todo pero dedicando tiempo a aquellos cuadros que tienen una historia detrás o representan algún momento histórico importante o curioso.

¿Lo mejor de todo? Ver la cara de la gente cuando Kike dice aquello de "este cuadro es una puta mierda, no sé ni cómo lo tienen colgado aquí". Y claro, tú ves al típico con cara de estar haciéndose el interesante que se gira con cara de indignado. Pero al ver colgado el distintivo de "Museo de El Prado" del cuello de Kike, les cambia la cara. Es como si viesen a la Guardia Civil después de no haber hecho un stop. Y muy discretamente se retiran del cuadro y pasan al siguiente.

Y después de aprender un poco del mundo de la pintura y de historia, unas cañas, bastantes, y a casita.

Gracias Kike.

Vacaciones


¿Hace falta decir algo más? Pues eso, vacaciones.

08 marzo, 2008

I´m fuckin Matt Damon



El cómico americano Jimmy Kimmel terminaba su programa con la frase "Sorry Matt Damon, we haven't got time for you" (Disculpa Matt Damon, no hemos tenido tiempo para ti). Una vez incluso invitó al actor al programa pero lo despidió sin que abriera la boca porque "desgraciadamente nos quedamos sin tiempo".

El chistecito se iba repitiendo día a día en su programa hasta que en su quinto aniversario su novia, la también humorista con show propio Sarah Silverman, le dijo que tenía algo que confesarle.

"Dentro vídeo" fue la frase detonante y desde entonces hasta que alguien lo subió a YouTube, lo que se mostró allí se ha visto más de 12 millones de veces a través de internet. En el vídeo, ella aparece pidiéndole disculpas a su novio por algo que debe contarle y, tras un guitarreo de suspenso, comienza un estribillo pegadizo que incluye al propio Matt Damon tarareando el estribillo que se repite en un sin fin de escenas cómicas mientras el actor detalla "en la cama, en el suelo, encima de la toalla cerca de la puerta, en la bañera, en el coche y contra el minibar".

Pero fue mejor, si cabe, la venganza. Despliegue de medios para un video con sorna.



02 marzo, 2008

Domingo y necesidad de museos

La idea de abrir gratuitamente los museos en domingo es buena; la consecuencia, mala. En una misma zona de Madrid podemos encontrar hasta cuatro grandes museos. A pesar de ello, las colas en cada uno de ellos, son insufribles. Hay que tener muchas ganas de ver una exposición en concreto para esperar, pacientemente, el turno.

Hoy me apetecía descubrir, por fin, la ampliación de El Prado pero no ha podido ser. Al final hemos ido al Reina Sofia. Picasso. No estaba yo hoy muy picassiano pero bueno, siempre me gusta plantarme delante de El Guernica. Impresiona el tamaño y lo que representa.

Al llegar a Madrid, hace ya más de cinco años, fui muchas veces, muchos domingos, a ver exclusivamente este cuadro. Es una frikada pero supongo que cuando llegas a Madrid haces cosas que, con el tiempo, sólo repites que puntualmente.

Nos ponemos muy tontitos con los museos. Nos llega a parecer que visitar tal o cual exposición es casi esencial. Supongo que son necesidades que nos creamos y nos crean. Necesidades creadas, otro gran tema. ¿De cuántas podríamos librarnos (o liberarnos)? Al menos yo, creo que de pocas. El hedonismo pega duro.

26 febrero, 2008

... aquí no soy ninguno... !

Es la frase que veo escrita en una pared en el camino hacia el metro. El primer día que la ví, busqué un vínculo con los 5 o 6 graffitis que la acompañan. No lo había. Es simplemente una frase que alguien ha escrito, en negro, con mayúsculas.

Suena absurdo pero hay veces que, al volver a leerla, le doy vueltas a la cabeza. Me imagino a un chaval de entre 14 y 20 años agitando un bote de spray mientras vigila que nadie le vea. Yo hubiese escrito algo como "aquí no soy nadie". Pero él (o ella) ha escrito "ninguno". Y esos puntos suspensivos a ambos lados dejan abierto el camino para completar la frase. Se me ocurre que puede ser el comienzo de un argumento, la conclusión e incluso la base sobre la que apoyarse para exponer una idea.

Esa sensación de no ser ninguno, nadie, la he tenido muchas veces. Ni tan siquiera es necesario estar en un sitio nuevo para sentirme así, ya que sucede incluso en lugares en los que, aparentemente, debo sentirme cómodo, integrado. Cuando ocurre, trato de averiguar el motivo y nunca doy con la clave. La sensación viene de la misma forma que se va (como se fue, vino....que dirían los chanantes).

No hablo de sentirse incómodo o rechazado, es una sensación diferente. Creo que aún me falta claridad para explicar la sensación. Espero que el anónimo escritor no ponga más frasecitas de ese tipo, por mi salud y la de los lectores del blog.


PD: (para entender el comentario anterior) http://www.youtube.com/watch?v=2OBZHB5I89A

18 febrero, 2008

Yes, we can Z

Víspera de elecciones nada mejor que hablar sobre ello. Muchos ya conocéis mis simpatías y antipatías políticas. Pero por encima de esto creo que se deben analizar aspectos que van más allá de lo que está bien o mal hecho. En una gestión cuatro años tengo en cuenta qué aportan las leyes que se aprueban a nuestra sociedad, y no sólo a intereses personales del momento.


Si defendemos una sociedad y un país abierto, tolerante e integrador, sus leyes deben estar en concordancia con estos principios. Si muchos de nosotros defendimos en su momento la no participación española en conflictos en el extranjero que respondían a intereses económicos estadounidenses, lo lógico es retirar las tropas que en ese momento estaban en Irak, como hizo en unos pocos meses el gobierno de Zapatero.


Si nos llevamos las manos a la cabeza a diario con las noticias sobre la violencia de género, lo lógico es aprobar, como se ha hecho, una ley que defienda a quienes son agredidas y ponga medios para frenar a cualquier cabrón que se le pase por la cabeza intentarlo.


¿Sociedad plural que admite con normalidad cualquier opción sexual? Pues si es esto lo que quiero, apruebo una ley de matrimonio homosexual.


La corrupción, en todas sus formas nos preocupa, de modo que se aprueba una ley de regulación de conflicto de intereses, que al menos establece penas y tipifica los delitos en este ámbito.


Ley del estatuto del trabajador autónomo, aprobada con el apoyo de las dos asociaciones mayoritarias del sector.


Una de las mayores causas de mortalidad son los accidentes de tráfico. Si con las campañas no es suficiente pues se refuerza con una reforma del código penal en materia de seguridad vial y con la implantación del carnet por puntos.


Otra causa de innumerables muertes y enfermedades: el tabaco. Para ello también legislo y apruebo una ley anti-tabaco.


Ley de reproducción asistida. Gracias a esta ley, en España se puede investigar con células madre para, intentar al menos, mejorar la vida de muchas personas con enfermedades consideradas crónicas o incurables como la diabetes por ejemplo.


Sí, todos nos vanagloriamos de defender la igualdad de género, nos parece injusto que desempeñando el mismo puesto de trabajo, nuestra mujer o nuestra hermana cobre menos. Pues seamos consecuentes y aprobemos, como ha hecho este gobierno la ley de igualdad.


Ley de dependencia. Si tengo un familiar a mi cargo que, por desgracia, no es capaz de valerse por sí mismo, lo que necesito no es compasión, necesito un apoyo económico mínimo. Ahora tengo la suerte de no necesitar esa ayuda, pero si un día la necesito sé que hay una ley, aprobada en estos cuatro años, que me asiste.


No miremos sólo qué nos promete cada partido en estos últimos días. Seamos consecuentes y analicemos todo lo aprobado estos últimos cuatro años. Más allá de datos económicos puntuales, me gusta pensar que hay unas leyes que intentan crear igualdad, que buscan una sociedad que ayuda al que menos tiene, al que menos puede y que hay unos servicios que intentan equipararnos a todos.


No voy a votar a Zapatero sólo por lo que pueda prometer, voy a votar a Zapatero porque considero que todas las leyes que se están aprobando dan una idea muy concreta de la sociedad que quiere, y me gusta esta sociedad que busca igualdad y pluralidad.

06 febrero, 2008

Fama... y ¿a bailar?



Bailar es esto señores. Dejémonos ya de decir si bailan bien o mal los chicos de Fama; bailan como el culo. Bailar, lo que se dice bailar, es lo que se ve en el vídeo. Eso es tener talento, ritmo, interpretar el baile, y lo que hacen o puedan llegar a hacer los criajos esos algún día de su vida no será ni la décima parte de lo que saben Fred y Ginger. ¡¡ Clap, clap !!

30 enero, 2008

No lo es

No es tan difícil recoger tus cosas y marcharte. No es tan difícil llamar y decir "te quiero". No es tan difícil hablar un rato cuando más lo necesites, tampoco si estás bien. No es tan difícil escuchar, y no responder de inmediato. No es tan difícil encogerte de hombros si no sabes algo. No es tan difícil sonreír para dar las gracias. No es tan difícil sentarte, respirar y después continuar. No es tan difícil callar. No es tan difícil pensar un momento que puedes estar equivocado. No es tan difícil dejar que te miren e incluso observen. No es tan difícil dejarte pasar. No es tan difícil mostrar lo que tienes.

¿Es tan difícil?

24 enero, 2008

¿Tienes fuego?

Parece mentira pero ya hace algo más de dos semanas que no enciendo un cigarro. Algún rato ha resultado extraña la sensación de mono, que no lo ha sido tanto, pero al final, de un modo u otro, lo he superado.

El caso es que agradezco infinitamente a Facundo que crease su empresa porque sus pipas me están salvando de más de un rato de semi-tentación. Digo semi porque otras veces que lo he intentado, lo pasaba mal cuando veía a gente fumar. Pero, ¡¡ oh, sorpresa de las sorpresas sorpresivas !!, ahora no me pasa.

He pasado ya por ese primer día que sales por la noche un fin de semana y la mitad de la gente con la que estás fuma tanto como tú fumabas antes, e incluso más. Y prueba superada. Todos los días salgo a tomar café con la gente del colegio. Cafetito, cigarrito, ¿verdad? Pues mira, ni me apetece.

Me queda alguna prueba de fuego más y esta es una de ellas: escribir en mi propio blog sobre el tema, en mi habitación y con un paquete delante (nada de mariconadas de esconder mecheros y cigarros), con un par.

Mañana me queda alguna más. Viaje largo en coche y sólo, para más inri. Y después de llegar, vete al Jim / Jes, que como allí no fuma nadie y sólo estoy "un rato" pues...

Se admiten apuestas, castigos e incluso premios sobre el tema.

19 enero, 2008

Me lo pido para el Juicio Final



Recomendable ver el reportaje "El juzgado de Emilio" de Línea 900. Se encuentra fácilmente en youtube.

17 enero, 2008

Organización caótica

Lo doy por imposible. Me declaro desordenado eterno. He intentado durante años ser organizado, pero no puedo. He seguido consejos de todo tipo y ninguno me ha valido nunca. Creo que el mejor que he escuchado ha sido el de "el secreto es volver a colocar todo en su sitio cada vez que se utiliza". Pues sí, pues claro que suena bien, pero coño, mira que me cuesta. Pienso que esa meticulosidad de cojo, uso, coloco, no está hecha para mi.

Una vez leí que esta incapacidad de ser ordenado puede ser síntoma de dos cosas. La primera: síntoma de uno o varios trastornos mentales. La segunda: síntoma de la combinación de varios tipos de inteligencia. Me apunto a ambas, me gusta considerarme loco aunque algo inteligente, creo que no es mala combinación. Unas gotas de locura y un poco de inteligencia, algo es algo.

No se si alguien se ha dado cuenta pero según esto que leí, los trastornos mentales son uno o varios, sin embargo cuando habla de la inteligencia, habla de la combinación de varios tipos así que salgo ganando. Ya sabéis, el clavo ardiendo.

10 enero, 2008

La paja y la viga


Qué fácil es leer algo y pensar, este se queja de vicio, pues vaya un flojo, no es para tanto. No sólo pensarlo, además decirlo. Todos nos quejamos y escuchamos cómo lo hace el resto. De hecho, muchas veces se inicia una conversación cuando uno de los interlocutores tiene un problema y quiere contarlo, o quiere consejo, o sabe que el otro tiene un problema y le pregunta. Eso si antes no nos ponemos a hablar de los problemas de otros.
Así que si tengo que quejarme, me quejaré. El que no quiera oirme que no lea este blog. Sonará borde pero es la verdad. Una de las funciones de este blog es el de terapia, tanto para el que escribe como para los que leen. Y parte de esa terapia es la queja.

Durante estas últimas semanas he podido observar que si estás malo y te quejas, eres un pupas. Si te dan la baja, joder qué suerte tienes. Si tienes vacaciones, qué bien vivís los profesores. El caso es que, hagas lo que hagas, siempre va a haber alguien que te ponga un adjetivo por hacerlo, alguien que te envidie o alguien que te diga algo y no precisamente para bien.
Así que me quejaré y el que tenga que decir algo, que lo haga. No va a ser nada nuevo, los hay que sólo ven la paja.

04 enero, 2008

Gripazo

Dame amoxicilina, dame paracetamol, dame tres o cuatro recetas. Pero no, en vez de todo eso, me manda una jarabe para la tos e ibuprofeno 400 mg, ¡¡400!!, pensé que eso ya ni se vendía. Si me entra un virus por los huesos y los músculos, lo mínimo es que me den medicinas potentes.

Como se fue vino, como vino se fue. "Los médicos sólo estamos para minimizar los efectos de los virus". No te jode, si yo lo que quiero es que me lo quites, minimizar los efectos es fácil. Unos miligramillos de amoxicilina, unos gramos de paracetamol, por caridad.