23 abril, 2008

Let´s dance (algunos no renuevan jejeje)

Ante la inesperada noticia recibida esta misma tarde, no he podido evitar poner la música a toda hostia y bailar como un gilipollas. Sí, ya sé que bien no bailo, pero después de un havana y el subidón que tenía encima, me ha dado por ahí. Y he aquí una muestra de algunos de los hits (variedad en su mayor acepción) que han sonado y que, como mínimo, hay que compartir con los lectores del blog que, en su gran mayoría, se solidarizan con la causa del Chile. Salud y buenos alimentos.









01 abril, 2008

Nunca antes de que sea tarde

Hace tiempo que me dí por vencido. Hace años que lo comprendí. Caí en la cuenta de que los planes, lo previsible y la disciplina personal, no están hechos para mí. Soy desordenado (en todas sus acepciones) desde siempre, cosa que no considero defecto, y menos virtud en aquellos que no lo son. Es simplemente algo que...es.

Los planes me ponen nervioso: ahora esto y luego lo otro. Que va, que va (que va...yo leo a Kierkegaard, que dirían algunos). Lo establecido me da escalofríos. Saber o conocer parte de lo que se va a hacer está bien pero gracias a dios (o Dios) existe la improvisación. Supongo que también hay que saber improvisar, y hacerlo bien, en ciertos momentos.

Algunos dirán que si no planeas ciertas cosas, tus actos o un encuentro, puedes cagarla. Claro, pero haciéndolo también. Y está comprobado. Con planes, la cagas. Improvisando, la cagas. Y viceversa. Conclusión, prefiero improvisar. Me va mejor.

Esto lo hago extensible al momento de acostarme. Hoy de verdad que me acuesto, como muy tarde, a las 11:30. Fácil, ¿verdad?. Mis cojones treinta y tres. Cuando digo eso, acabo en la cama entre doce y doce y media. No puedo evitarlo. Que si House, que si el portátil, que si un cigarro, que si una coca-cola, que si Buenafuente. De momento van a ser las doce y aquí sigo.

Por cierto, mañana cuando llegue me echo la siesta. Bueno, tal vez no.